El caso de Ignacio

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NOMBRE: Ignacio.

MARCA Y MODELO: Peugeot 2008 1.2 Puretech S&S Allure 110.

FECHA DE COMPRA: La compra se realizó el 09/08/2023, pero la fecha de su matriculación fue el 03/05/2017

Le comento que adquirí el vehículo en un concesionario de compra venta de vehículos (CARPLUS) con un kilometraje de 103690 kilómetros, estando a la hora de su recepción en perfecto estado tanto de mecánica como de carrocería, sin haber sufrido ninguna avería ni golpe, según me dijo el concesionario.

Estuve funcionando con el vehículo unos días y recibí una notificación del concesionario para que llevase el mismo a un concesionario oficial de Peugeot a fin de realizarle una inspección y, en su caso, el cambio de la correa de distribución. Cosa que hice en el mes de agosto de ese mismo año, comunicándome por parte del taller oficial que la correa se encontraba perfectamente y no hacía falta su cambio.

Continué circulando con el vehículo y entre los meses de octubre y noviembre se me encendió el testigo de falta de aceite. Me puse en contacto con el concesionario a fin de saber en qué situación se encontraba el mantenimiento de este y me comunicaron que se le había realizado el cambio de aceite, correa, filtros, etc. a la entrega del vehículo, por lo cual estaba todo muy reciente.

Ante tal incidencia, lo volví a llevar al taller oficial de Peugeot a fin de que me diesen una explicación de ese elevado consumo. Este me comunica que se le tiene que realizar una prueba, la cual consistía en cambiar de nuevo el aceite, realizar unos 1000 kilómetros con el vehículo y volverlo a llevar para realizar el pesaje del aceite y ver cuál fue su consumo.

Viendo esta prueba, solicité al servicio de garantía del vehículo, que tengo por 1 año desde la compra del mismo, que se hiciese cargo del coste de dicha prueba, cosa que se negaron alegando que es una prueba de consumo de un componente reemplazable del vehículo sin ser una avería justificada del mismo. Por tal motivo, opté por pagar dicha prueba y realizarla, haciendo esto el 17/11/2023.

Una vez realizados los 1000 kilómetros, vuelvo a llevar el vehículo al taller oficial de Peugeot el 13/12/2023 a fin de realizar el pesaje del aceite. El taller me comunica que efectivamente existe un consumo muy elevado de aceite y, por tanto, se tiene que realizar el cambio de motor del vehículo. Le comunico al taller que el coche está en garantía y este se pone en contacto con la misma a fin de determinar cuál va a ser la actuación sobre el vehículo.

A día de hoy y después de un sinfín de llamadas, escritos tanto a la compañía aseguradora como al concesionario, dándome largas o comunicándome situaciones absurdas como que el vehículo tiene que pasar la prueba anteriormente descrita o diciéndome que el vehículo lo tengo que llevar al taller, cuando este está en el taller desde el mismo día que lo entregué en diciembre, he conseguido de momento lo siguiente: que el perito de la compañía aseguradora se ponga en contacto con el taller. Este ha solicitado al mismo que se abra el cárter del vehículo para determinar cuáles son los daños causados.

Estoy a la espera del resultado de dicha inspección, ya habiendo dado el consentimiento correspondiente al taller oficial para efectuarla. Al mismo tiempo, el taller me comunica que, según su opinión, la reparación del vehículo consiste en la sustitución del motor por uno nuevo. No obstante, la política interna de Peugeot para ese tipo de averías consiste en realizar una reconstrucción del motor, cosa que me desaconseja con énfasis el jefe del taller oficial de realizar, ya que conlleva una reparación que a futuro puede dar problemas de todo tipo.

Esa es mi historia con el mencionado vehículo a día de hoy. Considero que, al estar en garantía, puedo optar por devolver el vehículo, ya que no me da fiabilidad ninguna de las dos opciones de reparación que tengo. Les mantendré informados de los acontecimientos que se deriven de dicha inspección, de la reparación que se le realice al vehículo y de las acciones que determine tomar al respecto.

Atentamente.